El 2021 nos dejó grandes proyectos y muy bonitos, y en esta entrada a nuestra galería de obras os vamos a hablar del más relevante del año, la rehabilitación completa del Restaurante La Molinera en Ramallosa, Nigrán.
Este local referente de la restauración del Val Miñor nos solicitó una rehabilitación tanto del interior como el exterior del restaurante. Lo más importante era mantener y conservar todos los molinos que se encontraban en el local y cuidar la estética exterior mejorando su presencia.
Las fases de obra que se realizaron fueron:
- Demolición
- Rehabilitación tejado
- Acondicionamiento del espacio bajo cubierta
- Rehabilitación interior respetando volúmenes
- Mejora zona baños
- Reforma integral espacio cocina
- Mejora de las paredes perimetrales
- Limpieza del muro exterior
- Mejora de los cierres
- Pintura y acabados interiores
- Cambio de carpintería de aluminio íntegra
El diseño y coordinación de obra lo hicimos conjuntamente con el arquitecto técnico Óscar Valverde Carnicero teniendo un fabuloso resultado gracias a detenernos en detalles tan increíbles con el suelo de cristal para mostrar los molinos en su estado inicial.
Siempre se dice que no se debe empezar la casa por el tejado, pero en la rehabilitación justo es el punto de inicio. Empezamos con el derribo del tejado conservando las vigas iniciales para restaurarla. El espacio de bajocubierta no tenía funcionalidad alguna y después de la rehabilitación se ha conseguido un espacio diáfano con increíbles vistas a la desembocadura del Río Miñor y dejando un espacio para una sala privada para grupos.
La zona de la barra era bastante oscura y no dejaba contemplar los engranajes superiores del molino. Esta parte se ha restaurado siguiendo las directrices para hacer una conservación íntegra de las partes que componen el molino y creando una estancia de comedor más versátil y amplia para dar cabida a más comensales. Uno de los puntos más bonitos de esta zona es el acristalamiento del suelo para poder observar el molino de piedra en su situación real.
Se demolió por completo y desde cero se construyó una barra nueva, con acabados en silestone calacatta negro emulando el mármol y madera que le dan un toque moderno. La tapicería es diseñada por Raúl Lamarca, con una combinación de colores muy sofisticados.
Detalles con encanto es el cuelgacopas realizado a medida según la tipología de copas a utilizar que agiliza el trabajo en barra.
En la cocina se demolió todo menos las paredes exteriores para poder hacer una redistribución del espacio, ampliando los baños. Las paredes exteriores se mejoraron en estética y acabados con un color gris elegante, creando junto con el mobiliario una de las mejores terrazas del sur de Galicia.
Que buenos veranos esperemos que pasen sus propietarios y toda la familia, agradeciendo la confianza depositada en nuestro equipo.